El más antiguo se halla junto al otro próximo que se bifurca en dos ramas y se le pueden contar hasta 12-14 ramificaciones, pero debido a su especial ubicación casi sin suelo, posiblemente tenga más de 180 años. Puede ser uno de los «Dragos Santos de Taganana», ya que tiene cicatrices con forma de cruz talladas en el tronco. Una rama de la primera ramificación se encuentra partida, así como otras de la segunda y tercera. Está algo escorado en el sentido de la ladera. Es uno de los pocos dragos silvestres que aún se conservan en Canarias. Dragos ubicados en zona de uso restringido según el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Rural de Anaga. Esta zona constituye una superficie con alta calidad biológica o que contenga elementos frágiles o representativos. Admite un reducido uso público, únicamente a pié.